Esta vez
empezaré por el final. Super 8 es una buena película, bien dirigida y con unos
tremendos efectos especiales. Os aconsejo que si aún no la habéis visto, no
leáis esta crítica. Disfrutad la nostalgia de los 80 con un film tan emotivo como
divertido y entretenido. Es, Junto a El
origen del Planeta de los simios, la mejor película del verano.
Nota: 7,5
Tras un
verano plagado de flojos Superhéroes y secuelas (o precuelas), llega a las
grandes pantallas un proyecto con guión original que empezó con un enigmático
tráiler y ha supuesto un éxito de crítica y público (más de lo segundo que de
lo primero).
J.J
Abrams dirige con gran acierto una película más que entretenida, con un fantástico
comienzo en el que asistimos al funeral de la esposa de Jackson Lamb y madre de
Joe (Joel Courtney). Pasan los meses y el niño ayuda a sus amigos a rodar una película sobre
zombies. Durante una de las escenas que ruedan, presencian un espectacular
accidente ferroviario. A partir de entonces aumentan los acontecimientos
extraños y desapariciones en el pueblo, y hacen acto de presencia los
militares.
Super 8 es
un buen producto que transmite la nostalgia de las mejores películas de los 80, de los clásicos de Spielberg. Y es más que obvia su influencia. Es como una mezcla de Encuentros en la tercera fase, E.T
y Los Goonies. Y aunque no sería justo ponerlas a la misma altura, la película
de Abrams nos transmite bastante bien la nostalgia de esos años. Un homenaje al séptimo
arte, resultado de la pasión cinéfila de JJ y realizada con sumo cariño.
He leído varias
críticas y en muchas la tachan de ser un flojo homenaje y un simple producto
prefabricado. Para mí hay algo más importante que eso y es la conexión con el
espectador. Evidentemente eso es algo subjetivo. E.T conectó conmigo cuando era
una niña y todavía sigo emocionándome con la película, Super 8 ha conseguido
algo parecido, ha conectado conmigo y me ha hecho salir con una sonrisa del
cine (cosa que hace meses que no sucedía…)
Los actores
infantiles hacen un trabajo espléndido, en especial Elle Fanning, que está un peldaño
por encima y nos deleita con una notable interpretación en esa escena de cine
dentro de cine, en la que no solo enamora al pequeño Joe, también a la cámara. No es de extrañar que ya sea una de las actrices más solicitadas de Hollywood (próximamente la veremos en Twixt de Coppola). Kyle Chandler simplemente está correcto haciendo su papel de poli bueno-padre regulero.
Los efectos
especiales son de gran calidad: la secuencia del descarrilamiento del tren es
espectacular y un prodigio del montaje y los efectos sonoros lo complementan a
la perfección. Desde luego, no podía olvidarme de la maravillosa banda sonora
de Michael Giacchino.
Entonces… ¿Dónde
está el fallo? En la incertidumbre que no crea el extraterrestre. Vale que
apenas le veamos debido a esos planos desenfocados y nos tiene algo intrigados
su aspecto, pero en ningún momento llegas a temer por la vida de los niños y el
final es terriblemente predecible.
En este
aspecto, es un film sencillo, pero lo cierto es que el contenido es mucho
más profundo para el espectador. Si has pasado de mi consejo y has leído la crítica sin haber visto la película, ten cuidado, que el próximo párrafo está plagado de spoilers.
La escena
de la reconciliación de los padres me pareció muy blanda en su momento y daba
la sensación de que así el director cerraba de un plumazo el tema de ese odio
irrefrenable entre ambos. Pero más tarde vemos el encuentro entre el
extraterrestre y Joe, en el que el –ya no tan- niño le dice “Pasaron cosas
malas, pero puedes marcharte”. Y
entonces es el conjunto lo que cuenta. Las similitudes entre el padre de Joe y
el extraterrestre. Como ambos han sufrido y culpan a alguien de ese sufrimiento.
Pero hay cosas que se deben dejar atrás porque no nos dejan avanzar (a Jackson le
podría haber costado la relación con su hijo; al bicho su libertad). Y
luego está el detalle del colgante, que a muchos les parecerá sensiblero, pero
que cierra a la perfección la evolución del personaje. La vida sigue.
Y
finalmente está ese brillante corto realizado por los niños, una obra de arte,
puro amor por el cine.
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